11 junio, 2008

- Del otro lado




Leí en alguna parte algo así como que " cada vez que el hombre negro mira al hombre blanco, le está clavando una daga".

Y es cierto.

Da igual lo que hagas, quien seas o las intenciones que tengas, porque contra los prejuicios de personas que no quieren ver ni escuchar, no hay nada que hacer.
Son Cabezas Cuadradas.

Puedes argumentarlo, intentar explicarles pero... ellos no te van a escuchar, no te van a responder.

Prefieren vivir en una ignorancia que no les contradiga, como una mentira que no exija disculpa ni perdón, con una realidad que no les cause conflictos internos... porque esas personas fallan, pero ellos "nunca se equivocan"

Y el problema está en sus cabezas.
Esas mentes que siempre creen tener la razón.

Luego lloran como niños cuando no les ve nadie... nadie les ve porque ya están solos.

Pero se convencen cada mañana al despertar que son los príncipes de la tierra y de que el rencor es un buen guía... Te machacan, te dicen que no vales para nada y se van a trabajar tan tranquilos con una sonrisa en la boca...
(y tú vas viendo... que las cosas no son lo que parecen...)

Quieren olvidar... pero sus enormes cabezas se inflan y se inflan de secretos y automentiras hasta que alcanzan tamaños insospechados. Eso les permite salir de cualquier situación por medio de la elevación. No espiritual, por supuesto, sino corporal.

Y así, con la cabeza hinchada y malhumorados, al pasar el tiempo te clavan puñalada tras puñalada -que son sus carencias, sus propias limitaciones e inseguridades-, haciendo lo blanco negro, haciendo blanco justo en el centro de tu pecho.

Para entonces ya estás perdido...

Venganza es una palabra que no debería usarse para determinados asuntos...

Hay personas, que abusan demasiado de ella... hasta el punto de hacerse un daño a sí mismas solo por el hecho de no aceptar el error. Solo por tener la última palabra. Sin saber. Sin sabor. Solo por el placer de sentirse superiores... es su manera de sobrevivir...
Condenan y juzgan sin conocimiento sólo para salvarse. Para salvar sus propios culos. ¿Salvarse? Y de qué? de la muerte? del olvido? de ser condenados por sus casi inapreciables crímenes diarios? o quizá de ser descubiertos por fin en su miserable existencia?

luego lloran... lloran como niños y olvidan el camino de regreso a casa


1 comentario:

Anónimo dijo...

ufff
refuerte